Atendiendo una invitación de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales (UDCA) y en el marco de la Semana Andina organizada por dicho claustro académico, en fecha 13 de abril del año en curso el Embajador Mario Carvajal Lozano hizo algunas reflexiones en torno al fenómeno del cambio climático y los derechos de la Madre Tierra, nuestra Pachamama.

“El cambio climático es una realidad que cada vez tendrá más incidencia en nuestras vidas. Día a día aumenta la información sobre tempestades, inundaciones y sequías, se presentan variaciones extremas de temperaturas, hace más calor en invierno, menos lluvia, menos nieve; se adelanta la primavera, las plantas florecen o las aves regresan antes de lo esperado”. Todos estos cambios son síntomas de una aceleración del cambio climático, o calentamiento global, como también se lo conoce, señaló inicialmente el Embajador Carvajal durante su reflexión, detallando a continuación las causas de dicho fenómeno.

En otro aparte de su reflexión, hizo mención al Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, fruto de la concertación de los Gobiernos firmado en 1992, acuerdo que ha sido aceptado por 189 países, es decir, la casi totalidad de países; y al Protocolo de Kyoto que data del año 1997 y que compromete a los países industrializados a reducir o limitar sus emisiones de gases de efecto invernadero y a alcanzar ciertos objetivos en materia de emisiones para el 2012.

Finalmente, señaló que a partir de la iniciativa del Presidente Evo Morales Ayma, se impulsó la organización de la “Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra” -celebrada en abril del año 2010- y que congregó a más de 35 mil personas provenientes de 142 países que se dieron cita en Cochabamba para discutir las soluciones reales a la problemática del cambio climático.

Entre otras propuestas, los participantes en la mencionada conferencia consideraron importante la obligación de los países de honrar su deuda climática, el reconocimiento de los derechos y necesidades de los migrantes por causas climáticas, la constitución de un Tribunal Internacional de Justicia Ambiental, la realización de un Referéndum Mundial sobre el Cambio Climático y la aprobación de la Declaración Universal sobre los Derechos de la Madre Tierra.